Cuando hace años me planteaba ser fotógrafo de bodas nunca imaginé que iba a vivir experiencias tan gratificantes como las que estoy viviendo. Y es que conocer a Ibana y Manuel es toda una experiencia, siempre llevo como bandera la intención de hacer bodas naturales, bodas que reflejen la personalidad de los novios, para conseguir esto tienen que confiar mucho en tí y que realmente el ser natural, el ser tu mismo forme parte de tu personalidad. Sin duda alguna Ibana y Manuel cumplen todo esto y mucho más. A parte de todo esto, algo que me viene ocurriendo y que me hace muy feliz es que muchas de las parejas que acuden a mi tienen hijos, es algo que no he buscado pero la verdad es que me ocurre mucho. Y me encanta, sobre todo por que ellos lo viven con una intensidad increíble y me obliga a mirar la boda con otros ojos, con la mirada del descubrimiento y la pasión que ponen los pequeños en todo.
Ibana, Manuel y su pequeño Manuel se casaron en La Linea, y me ofrecieron la oportunidad de entrar en sus vidas, de compartir con ellos, sus amigos y familiares una boda sencilla, emotiva y natural.
Gracias !